Este que estamos intentando es un juego, muy serio, de prueba y error. Es todo tan incierto, desconocido y vertiginoso en este mundo muy nuevo del periodismo desde las nuevas plataformas, que oscilo en mi pensamiento sobre si no habré llegado muy tarde a esto o si lo habré hecho demasiado temprano. Tarde porque después de 35 años de andar en el periodismo hay razones de este nuevo mundo que la razón no entiende, aún. Temprano porque parece que no hay fórmulas probadas, porque se escucha mucho a especialistas en la web, en diarios web, en los blogs, en las redes sociales, y nadie consigue mostrar la patente que lo acredite como dueño de la nueva verdad.
Pero el tema era intentar y seguir el oportuno concejo de entrañables colegas y amigos animándome a hacer el intento. Por eso damos el primer paso en este suelo semi desconocido y lo hacemos con la intención de ver si realmente como dicen se puede abrir un canal de expresión, de búsqueda de una comunicación seria, sincera, profesional, con noticias, personajes, notas y sueños. Por eso el espacio está abierto para todos aquellos que quieran participar e interactuar desde el periodismo. Solo se reclama sinceridad profesional y respeto por la ética en general y periodística en particular. No nos interesa hacer periodismo de periodistas. No porque creamos que haya que ser corporativistas, sino porque estamos seguros de que al receptor es un tema que no le interesa y a nosotros es un tema que no nos enriquece. La experiencia nos enseño a entender que cuando más cerca están los periodistas de hacer periodismo de sus pares más lejos quedan de la verdad y de los receptores, sean lectores u oyentes.
Al mismo tiempo creemos que debe quedar claro que si este es un intento y una aventura periodística, de ninguna manera descarta la posibilidad de que se convierta en un modo de vida. Por lo que no está vedado el ingreso de publicidad, siempre que esta no vulnere principios humanitarios, sociales o morales.
Esta presentación no pretende ser una formal declaración de principios. Es apenas una algo extensa reflexión sobre el intento de ingreso a un nuevo mundo. Veremos que nos espera al desembarcar y que podremos lograr al hacerlo.
Y para el final el homenaje, ya que la denominación del blog no pretende apropiarse de nada ni plagiar una brillante frase. Es un homenaje a la película Pelota de Trapo, a don Ricardo Lorenzo Rodríguez, Borocotó, autor del guión de ese film de 1948 y de ese canto hermoso de los pibes regresando a sus casas desde el potrero: «Siento ruido de pelota, y no sé, y no sé, y no sé lo que será;
Es el club de Sacachispas que se viene, que se viene, que se viene de ganar.»
Como decíamos al principio, comienza un juego, muy serio, de prueba y error.